martes, 8 de noviembre de 2016

¿No les ha pasado que a veces no sabe como combinar su prenda favorita?


Pues es sencillo; si quieres lucir sobria usa colores del mismo tono en diferentes gamas, por ejemplo azul 002 + morado 002. Si quieres llamar la atención o lucir algo jovial, puedes jugar con las diferentes tonalidades o gamas, por ejemplo azul 006 + naranja 047.


El azul en el cabello. comienzo que la primera vez que teñí mi cabello fue color azul rey :c  se requieren muchos cuidados para los colores de fantasía, un shampoo adecuado y un bálsamo extra humectante ... y mucho valor para llevar el cabello así, sobre todo si como a mi, el tono de piel no las acompaña...



hasta la próxima entrada!!!
Bueno, les dejo un link de wiki hoy sobre varias cosillas básicas del color azul

https://es.wikipedia.org/wiki/Azul

siempre sus comentarios ideas o sugerencias son bien recibidas

Vamos a ver que más significa el color azul, que nos dice:


Según Conroy, la asociación primaria que se tuvo del color azul fue con la verdad. La tranquilidad y claridad del cielo conducían a la autenticidad.
Hoy en día, el pigmento lleva a la tristeza. El famoso género musical aunado a distintas frases anglosajonas, podrían estar relacionadas con las lágrimas y la lluvia, ya que típicamente el agua es representada de color azul. En la mitología griega, Zeus hacía llover cuando estaba triste.



Azul: Es el color que más se considera como símbolo espiritual. Se le compara con la trasparencia del aire, del agua, del cristal y del diamante. También con el mar, el cielo, el espacio, puesto que no bloquean la mirada sino que la dejan perderse en ellos. Envía una vibración de equilibrio, de armonía y de alegría de vivir. Agranda el espacio a la vez que lo vuelve luminoso. El azul, todo profundidad y frescura, contiene una promesa de libertad. Simboliza la calma de una mar tranquila, la suavidad de modales, la ternura, el amor a la vida. Representa la plenitud de los más fervientes anhelos de unificación y de comunión con la naturaleza, la verdad y la confianza, el amor y la dedicación, la sumisión y la devoción. Simboliza lo tradicional, los valores permanentes, la eternidad sin tiempo.
La contemplación de este color – mientras más oscuro, mejor – tiene un efecto pacificante para el sistema nervioso central. La presión de la sangre, los ritmos del pulso y de la respiración se lentifican, dando lugar
a la actuación de los mecanismos auto-protectores de organismo y produciendo una tranquilidad saludable. Los lugares donde uno busca relajarse debieran tener reflejos azules. Un entorno azul oscuro es lo más adecuado para practicar meditación. La luz azul hace volver el sueño en algunos casos de insomnios rebeldes.
Cuando este color es el preferido por una persona en un test, revela una necesidad por quietud, paz, armonía, descanso, relajación y oportunidad para equilibrarse interiormente. Se desea un entorno calmo y ordenado, libre de disturbios y presiones, en el que los eventos puedan desenvolverse en forma suave a lo largo de líneas más o menos tradicionales, y donde las relaciones con los demás sean plácidas y libres de confrontaciones. Muestra una necesidad de sentir que se puede confiar en quienes lo rodean y de percibir que ellos a su vez confían en él.
Si este color es rechazado, significa que existe una intensa frustración por la carencia de todo lo descrito anteriormente, lo que conduce a un estado de ansiedad e, incluso, de angustia. Hay desasosiego, desaliento, deseos de escapar cortando todo tipo de lazos, sean emocionales, sociales o laborales. Hay falta de concentración, dificultades de aprendizaje en los niños, conducta inconsistente y agitación mental. Esta profunda inestabilidad puede llevar a la búsqueda de compensaciones, ya sea por una conducta sexual promiscua o por la práctica de deportes de alto riesgo. Si esa situación se prolonga demasiado tiempo, conduce a perturbaciones del sistema nervioso y a trastornos cardiovasculares.
Es aconsejado para calmar las neuralgias, el asma, los reumatismos, las crisis nerviosas y la hipertensión por sus propiedades analgésicas y antiespasmódicas.



El color azul de manera esotérica

El color es una parte del espectro lumínico, y, al fin, es energía vibratoria.
Y esta energía afecta de diferente forma al ser humano, dependiendo de su longitud de onda (del color en concreto) produciendo diferentes sensaciones de las que normalmente no somos conscientes.
Significado Esotérico del Color Azul
  • El azul es el color del cielo y del mar, por lo que se suele asociar con la estabilidad y la profundidad.
  • Representa la lealtad, la confianza, la sabiduría, la inteligencia, la fe, la verdad y el cielo eterno.
  • Se le considera un color beneficioso tanto para el cuerpo como para la mente. Retarda el metabolismo y produce un efecto relajante. Es un color fuertemente ligado a la tranquilidad y la calma.
  • En heráldica el azul simboliza la sinceridad y la piedad.
  • Es muy adecuado para presentar productos relacionados con la limpieza (personal, hogar o industrial), y todo aquello relacionado directamente con:
    • El cielo (líneas aéreas, aeropuertos)
    • El aire (acondicionadores paracaidismo)
    • El mar (cruceros, vacaciones y deportes marítimos)
    • El agua (agua mineral, parques acuáticos, balnearios)
  • Es adecuado para promocionar productos de alta tecnología o de alta precisión.
  • Al contrario de los colores emocionalmente calientes como rojo, naranja y amarillo, el azul es un color frío ligado a la inteligencia y la consciencia.
  • El azul es un color típicamente masculino, muy bien aceptado por los hombres, por lo que en general será un buen color para asociar a productos para estos.
  • Sin embargo se debe evitar para productos alimenticios y relacionados con la cocina en general, porque es un supresor del apetito.
  • Cuando se usa junto a colores cálidos (amarillo, naranja), la mezcla suele ser llamativa. Puede ser recomendable para producir impacto, alteración.
    • El azul claro se asocia a la salud, la curación, el entendimiento, la suavidad y la tranquilidad.
    • El azul oscuro representa el conocimiento, la integridad, la seriedad y el poder.


http://bigdeluxe.net/colores.html  como siempre, link para más información

El pájaro azul, mito y una posible verdad acerca del alma gemela


Hace unos días veía una película de Shirley Temple, una adaptación de una historia escrita por Mauricio Maeterlinck llamada “El Pájaro Azul”. En una escena, los protagonistas, los hermanos Tylil y Myltil , llegan al País del porvenir, habitado por niños destinados a nacer. El tiempo, representado por un anciano, llegó a llevar consigo a aquellos que debían ir a la tierra. Una pareja de niños enamorados lloraba por la partida de uno de ellos.

   Tiempo: Tu nombre fue dicho, ven acá. ¿Qué no me has oído? ¡Ven acá! ¿cuál es el problema, si no los están deteniendo?
    Él: Por favor, quiero quedarme aquí con ella
    Ella: ¿No puedo ir con él?
    Tiempo: Imposible
    Él: Entonces no voy al mundo, señor!
    Tiempo: No puedes escoger
    Ella: ¡Te suplico, nos amamos tanto! Y yo iré al mundo demasiado tarde
    Él: Yo habré partido antes de que ella baje
    Ella: ¡Yo sé que jamás lo veré allá!
    Tiempo: Esto no es asunto mío
    Él: ¿No lo entiende? ¡Estaremos solos en el mundo!
    Tiempo: Yo los llamo y parten, esas son las órdenes. ¡Vayámonos!
    Él:¡ Yo no voy al mundo, no voy!
    Ella: Déjelo conmigo, déjelo por favor
    Tiempo: ¡Vamos, vamos! ¡Él no va a morir, él va a vivir!

Para mejor entender, “El pájaro azul” narra acerca de un par de hermanos que recorren diversos lugares, en búsqueda del ave que representa la felicidad. Finalmente no lo encontraron en su travesía,  dándose con la sorpresa que el pájaro azul estaba en su propia casa.

A veces me pregunto si la vida misma es igual a la historia. Quizá nos pasamos demasiado tiempo buscando en otras personas, lugares, situaciones y experiencia a nuestro pájaro azul. ¿Y, si hemos intentado hallar la felicidad hasta pensar en no poder hacerla nuestra? ¿Y si no nos damos cuenta que está en nosotros mismos?

Los niños me dieron particular curiosidad. Todos – hasta los incrédulos – esperamos silenciosamente a nuestra media naranja, pera, fresa, o cualquier fruta apetitosa de la que no podamos saciarnos, que nos sea agradable a la vista y disfrutarla a mordiscos. Y, después de cada ruptura de esas que nos invita a recorrer la galleta de soda por las venas – a menos que realmente hayan cogido un objeto punzante – llegamos a pensar que “yo no nací para amar, nadie nació para mí”, y escuchar todas esas canciones cursis para fracasos amorosos. No obstante, también es probable que realmente no exista ese mito acerca del amor de tu vida, de príncipes y princesas, de historias de Disney con final feliz; nadie asegura que tu alma gemela del País del porvenir haya llegado a la tierra sincronizado contigo para acompañarte entre los mortales.

Pienso, ahora, que el  alma gemela puede no haber aterrizado a tiempo. Si tienes suerte, le conocerás, y podría ser alguien de tu edad, tu calle, tu universidad o amigo de un amigo; podrán cruzar miradas y la complicidad que viene de otro mundo los llevará a unirse. Puede ser alguien que se demoró en nacer, o nació antes que tú, cuya piel tengan una evidente diferencia de textura por la edad, pero cuyos corazones laten al mismo ritmo. Los menos afortunados serán los que no pudieron conocer al alma gemela en este mundo, como el niño de la película; esos que andan de ruptura en ruptura y se acostumbran a la vida en soledad, los que pasarán la vida entera buscando, y en el peor de los casos se aferran a un “te amo” vacío para no sentirse apartados de la historia ideal que todos pretenden protagonizar.

(Por cierto, a quienes unieron sus almas en la tierra, ámense sin importar lo demás).

Ahora estoy convencida que, si nos pasamos la vida buscando a nuestro ideal, no encontraremos al pájaro azul que tanto anhelamos . Buscar en el interior sería la mejor opción: cuando encuentres la riqueza interior, sabrás como identificar a tu alma gemela. Y si no aparece… la vida sigue, siempre sigue. El tiempo lo dijo: ¡él no va a morir, él va a vivir!

Eso me hace recordar que aún tengo tiempo. Tiempo para vivir.

El color azul en la mitología.

El canto del ave azul y su simple visión están profundamente ligadas a la felicidad, esa felicidad certera y casi infinita, que no viene del dinero o lo que se posee, es un ave mística.

Cuentan que, en la antigua India un rico marajá recibió la visita de un sabio que le habló de la existencia de un pájaro azul que otorgaba la felicidad a quien lo encontrara. Sin dudarlo, abandonó su palacio y recorrió medio mundo en busca de tan preciada ave. Pasaron los años y decepcionado por lo negativo de su búsqueda regresó a palacio, pensando que aquel sabio le había engañado.
Días después, viendo al pájaro azul en un sueño, regaló sus palacios y todas sus posesiones y nuevamente fue mundo adelante en busca de lo que ahora sabía certeramente que existía. Nuevamente pasaron los años sin éxito en la búsqueda, por lo que ya anciano y moribundo regresó a su ciudad para morir en ella.
Pasando cerca de su antiguo palacio, sus nuevos dueños lo reconocieron y por caridad le dejaron pasar la noche en el sótano. Al amanecer el anciano despertó en la soledad del sótano y, viendo que su vida llegaba a su fin, a punto de exhalar su último suspiro, percibió un hermoso canto de ave y un suave resplandor que le hizo voltear su cabeza hacia lo profundo del recinto. Y entonces las lágrimas brotaron de sus ojos al encontrar, por fin, lo buscado. Allí, en lo más profundo del sótano, donde nunca había bajado durante su estancia en palacio, se encontraba un hermoso pájaro azul silbando un melodioso canto.





Era un joven Rey, que vivía en un gran palacio pintado de oro. Era un hombre muy apuesto, pero incapaz de mirar al pobre, ni al indefenso, tampoco al enfermo y mucho menos la simplicidad. La belleza era el símbolo aprendido de lo perfecto, asociado al  todo lo que su oro podía comprar. Aun así, no lograba encontrar la felicidad, hasta que un hermoso canto cambió su vida para siempre.
El Rey se encontraba en el balcón de su gran habitación y escuchó el trinar de un pájaro. Era como un canto angelical, capaz de llenar su corazón vacío por una extraña paz desconocida por él. Desesperado, buscó el origen del sonido que salía de su habitación, pero sólo vio una hermosa jaula de oro, con un pájaro gris que su padre antes de morir le regaló. Por lo tanto, al parecerse tan insignificante, decidió bajar a sus opulentos jardines, pero nada encontró. Triste, convocó a los sabios de su reino, y éstos le informaron que se trataba del famoso pájaro azul, una especie mágica difícil de encontrar, porque sólo se mostraba a las almas nobles de corazón.  El Rey, consciente de la impureza de su alma, decidió viajar por su reino sembrando su bondad, sin dejar de buscar el pájaro de sus sueños. Por el camino, con cada una de sus acciones, transformó la tristeza de sus súbditos en alegría, pero aun así, no lo encontró.
Un día, viejo y cansando, con la muerte trasformada en su sombra, decidió regresar a su palacio. Al llegar a su habitación, vio que su viejo pájaro gris esperaba por él. Feliz por el regreso de su amo, comenzó a cantar llenando su corazón de paz. El Rey observó que era diferente, con una belleza inusual, y lleno de gozo se sentó en su diván, para dormir arrullado por su canto angelical.
Al día siguiente, encontraron al Rey muerto en sus aposentos, con una hermosa expresión de paz en su rostro, y arropado con las alas azules de un pájaro que dormía junto a él.
Eva Franco



Erase tiempo atrás un Rey que enviudó, y al que la tristeza le invadió. Cenizo y agrió se tornó el Rey hasta que, pasada una temporada, conoció a una mujer de la que se enamoró. El monarca, totalmente embriagado de amor, comenzaba a superar la tragedia por la pérdida de su esposa, mientras una nueva Reina se alzaba ante el pueblo. Rey y Reina tenían, por separado, una hija cada uno. Florine, hija del Rey, era preciosa y de noble corazón; todo lo opuesto a Truitonne, descendiente de la nueva reina, maleducada, egoísta y poco agraciada. Su carácter suspicaz, contagiado a la Reina, pronto provocó celos hacia Florine y su belleza.
Y se arreciaban tiempos más complejos, pues el Rey sentía que sus hijas, natural y adoptiva, debían ser casadas. Se concertó la visita del Príncipe Encantador, y la recelosa Reina unió fuerzas con su hija para que éste se fijara en ella y solo en ella. Tamaña treta requirió de sobornos a las damas de honor, quienes le robaron a Florine sus joyas y vestidos y se los dieron a Truitonne. De nada sirvió, puesto que la belleza ni mucho menos es apariencia, y el príncipe se enamoró de Florine. Rabiosas, la Reina y Truittone presionaron tanto al Rey, que éste ninguneó a Florine el resto de la visita.
Pero, pese a todo, el Príncipe Azul seguía encandilado de Florine. Tanto era así, que rechazó los regalos que la Reina le envió, uno tras otro. Ella, montada en cólera, le advirtió que Florine estaba encerrada en una torre, de la cual no saldría hasta que él no partiese. La indignación del Príncipe fue en aumento, y solicitó de nuevo hablar con Florine. La situación, aparentemente inofensiva, dio pie a una nueva artimaña de la Reina, quien estableció un lugar de encuentro tan tan oscuro, que Truitonne hizo de impostora. El Príncipe, confuso y habiendo caído por completo en la trampa, le pide por error la mano a Truitonne.
Nada detiene ya a Truitonne una vez el Príncipe ha hecho una promesa, y conspira con su hada madrina para engañarlo y casarse con él. Así pues, en la ceremonia de boda, Truitonne trae el anillo y expone el caso a todo el mundo. El Príncipe, burlado por Truitonne, se niega a contraer matrimonio con ella. Nada en el fondo puede hacer ésta para persuadirlo, pero su hada madrina, Mazilla, lo amenaza con una maldición si rechaza el casamiento. El Príncipe, terco, es transformado en un pájaro azul por osar contrariar al hada rompiendo su falsa promesa.
Enterada la Reina de las vicisitudes acontecidas, señaló como culpable a Florine. Con esta excusa tan perfecta, Truittone pudo vestirse de novia, y enseñó el vestido a Florine al tiempo que le hacía saber que el Príncipe Azul había accedido a casarse con ella. La argucia se completó engañando al Rey, haciéndole creer que su Florine estaba obsesionada con el Príncipe, y que mejor debía permanecer en la torre mientras tanto.
El encierro de Florine, por tanto, quedó injustamente prolongado. Pero Florine no estaba sola… pues un tierno pájaro azul la visitó una noche y le contó todo lo que había sucedido a sus espaldas. Desde aquel encuentro nocturno, el pájaro azul acudió muy a menudo, y en cada una de sus visitas llevó a Florine obsequios y joyas.
La maldad de la reina, por otro lado, no se detuvo, y  ésta no cesó en su empeño de buscar un pretendiente a la altura de su Truitonne. Rechazada una vez tras otra Truitonne, la Reina hubo de recurrir a Florine y, al subir a la torre, sorprendió a ésta cantando con el pájaro azul. Nada habría sucedido de no ser porque la Reina descubrió las joyas, y supo que Florine había sido ayudada por alguien… Sin más demora, se vertieron acusaciones de traición sobre Florine, conspiración que el pájaro azul se encargó de frustrar.
La persecución sobre el pájaro se hizo pronto conocida, tiempos en los que Florine no se atrevió a llamarlo. La Reina había dispuesto espías para ello, y Florine sólo recurrió al pájaro azul cuando supo que los secuaces dormían. Pero, tan de segura que estaba, el espía escuchó sus conversaciones una noche, y a la Reina lo hizo saber. Ésta, furiosa, y sabedora que los pájaros se posaban en el abeto, mandó colocar metales punzantes y vidrios en sus ramas. El pájaro azul, tras caer en la trampa, fue fatalmente herido e incapacitado para volar, sin poder acudir hasta su amada, la cual no dejaba de llamarlo. Pero Florine cayó en un malentendido, y pensaba que el pájaro azul la había abandonado. Un mago, por suerte, sí oyó al Príncipe atrapado sin poder volar en el abeto, y lo rescató.
El mago, especialista en encantos, consigue persuadir a Mazilla para devolver por un tiempo al Príncipe su forma original. En dicho periodo el Príncipe debía aceptar como esposa a Truitonne o, de lo contrario, volvería  a ser transformado en un pájaro.
En este trance estaba la historia cuando el Rey falleció. Los habitantes del reino, que querían mucho a su monarca, enseguida demandaron la liberación de su hija y heredera, Florine. La Reina, terca como ella sola, opone resistencia al pueblo, el cual, sin miramientos, acaba matándola. Truitonne, a tiempo, consigue huir en pos de su hada madrina Mazilla, no pudiendo evitar la coronación de la nueva reina: Florine. Ésta pronto comenzó a buscar a su Príncipe Encantador, ahora Rey.
En una odisea sin parangón, Florine se viste con atuendos de campesina y emprende un viaje para encontrar al que sería su Rey. Así andaba cuando se tropezó con una anciana, que resultó ser otra hada madrina. Esta informa a Florine de que el Príncipe ha vuelto a su forma humana y ha prometido casarse con Truitonne. Al tiempo, el hada también le concede cuatro huevos mágicos. El primero lo utilizaría para trepar una alta montaña de marfil. El segundo contiene un carro tirado por palomas, el cual transporta a la querida Florine hasta el castillo del Príncipe Encantador, ahora Rey. No obstante, Florine no puede personarse ante el hombre al que ama y Rey del castillo como una vulgar campesina.
Para encontrar los mejores vestidos del reino, Florine trama vender a su malvada hermanastra Truitonne las joyas que el Príncipe en forma de Pájaro Azul le había regalado. Truitonne, desconcertada, envía las joyas al Rey Encantador para que las tase. El Rey reconoce de inmediato las joyas como aquellas que regaló a su amada, y entristece al momento porque considera que ella no ha valorado dichos obsequios y no ha entendido su significado… Truitonne devuelve las joyas a Florine, y ésta accede a venderlas durante una noche en la Cámara de los Ecos, lugar que una vez el Príncipe le había dicho que era como estar en su propia estancia. De esta manera, todo lo que se hiciese y dijese en la Cámara de los Ecos, sería escuchado en los aposentos del nuevo Rey. Durante toda la noche, Florine se lamentó, lloró y reprochó al Rey que la hubiese abandonado y, por desgracia, nada de esto llegó a los oídos del amado, pues había tomado una poción para dormir. Algo que, por supuesto, Florine desconocía.
Habiendo resultado en vano los dos primeros huevos, Florine rompió el tercero, también mágico, y en él encontró un pequeño vagón tirado por ratones. De nuevo, comercia con él a cambio de una noche en la Cámara de los Ecos, momento en que aprovecha de nuevo para sollozar y hacer manifiesto su lamento. También de nuevo, resultó en vano, y sólo los pajes la escucharon.
Al día siguiente, Florine emplea su último recurso: romper el cuarto huevo mágico del hada madrina. En él, un hermoso y suculento pastel aparece junto a seis pajarillos cantarines. Florine ofrece una porción a un paje, quien le confiesa que el Rey toma pociones para poder conciliar el sueño. Sobornando al paje con los pájaros que cantan, éste accede a no administrar la poción al Rey. Estando éste despierto por una noche, pudo escuchar el quejido lastimero de Florine en la Cámara de los Ecos, y allí que acudió reconociendo la voz de su querida.
Felizmente reunidos, Florine y el Rey Encantador se abrazaron, como si ya no quisiesen despegarse nunca. El mago encantador y el hada de los huevos mágicos, conmovidos con la dulce escena y reconociendo en ella al amor verdadero, juraron hacer todo lo posible por preservar dicha unión. Para ello, cuando la malvada hada Mazilla quiso interferir a favor de Truitonne, éstos convirtieron a la malévola hermanastra en un cerdo. Y, como no, el Rey y la Reina Florine se casaron y reinaron con dicha, para ellos y para su pueblo, por el resto de los tiempos.



Cuentan que ya hace mucho tiempo, el hermoso pájaro azul tenía las plumas descoloridas y muy feas. Pájaro azul vivía cerca de un lago cuyas aguas tenían un bellisimo color azul. Cada día Pájaro azul se bañaba en el lago cuatro veces y cantaba feliz:
Hay un agua azul.
Se encuentra aquí. 
Yo entré al agua,
Y me puse todo azul.
El cuarto día que Pájaro Azul se bañó en el lago, todas sus plumas se le cayeron y salió del agua completamente desplumado. Pero el quinto día, al salir del agua vio que sus plumas volvieron a crecer y eran azules.
Durante todos estos días, el dios Coyote había estado observando a Pájaro Azul para cazarlo, pues estaba famélico, pero le daba miedo entrar al agua azul. Al quinto día, Coyote le preguntó al ave: -¿Podría usted decirme cómo fue que sus feas y descoloridas plumas se le convirtieron en esas plumas azules y hermosas? Es usted la más bella ave que vuela por los cielos. ¡Yo también quiero ser azul! Pájaro Azul le respondió que se había bañado en el lago cuatro veces, mientras cantaba una canción. Como el pájaro era muy bueno, le enseñó la canción a Coyote. Esperanzado con ser azul, Coyote hizo su miedo a un lado y se arrojo al agua, acción que repitió durante cuatro días, sin olvidar la canción que le enseñara el ave. Al quinto día, Coyote lucía un esplendoroso color azul. Muy orgulloso de su nuevo color, se puso a pasear por todos lados, miraba a todas partes para ver si alguien se daba cuenta de lo fino y hermoso que se veía.
Entonces se puso a correr rápidamente mirando hacia el suelo para ver si su sombra era también azul, tan ocupado estaba que no se dio cuenta que chocaba contra un tocón de un árbol, el cual se cayó y levantó un montón de polvo de tierra por todos lados que la cayeron a Coyote en su pelaje. Desde entonces, todos los coyotes son del color del polvo de la Tierra.
Sonia Iglesias y Cabrera



https://es.wikipedia.org/wiki/El_p%C3%A1jaro_azul  les dejo un link a wiki sobre una película
(-*u*-)/ bye

lunes, 7 de noviembre de 2016

colores de tonalidad fuerte con los que no deberías combinar el color azul:



Amarillo
Fucsia
verdes musgo u otro similar
colores fluor

claro, estas son recomendaciones, pero en gustos no hay nada escrito



Hablando sobre el color azul! ya vieron la serie Ao no exorcist? o Ao no hana?


llamas azules como las producidas por la combustión del gas *o* belleza sublime